En algún punto perdido del universo, hubo una vez un astro en el que unos animales inteligentes inventaron el conocimiento. Fue aquél el instante más mentiroso y arrogante de la historia universal (Nietzsche, 1873). La verdad enmudece; interrumpe cualquier debate. De modo que la ciencia, esa que se ha apropiado de “la verdad”, describe al mundo tal y como es, y no hay manera de argumentar lo contrario. El científico, esa criatura que trabaja en los laboratorios, es un ser que posee las...